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CARACTERÍSTICAS DEL LÍDER DE UNA SECTA DESTRUCTIVA

Los líderes de sectas destructivas presentan características sociopáticas, narcisistas y manipuladoras. Carecen de empatía, utilizan el carisma para atraer seguidores y son autoritarios. Se aprovechan de las debilidades de sus miembros, fomentan la obediencia ciega y suelen ser mentirosos patológicos. Buscan reconocimiento y control, explotando sexual y emocionalmente a sus adeptos. Te presento algunas características representativas de su persona y conducta. Los líderes de sectas suelen tener rasgos sociopáticos y narcisistas que les permiten manipular a sus seguidores. Estas características les ayudan a mantener el control y la devoción de sus adeptos. La despersonalización de los seguidores es una táctica utilizada por los líderes de cultos. Ven a sus adeptos como herramientas para alcanzar sus objetivos y no sienten culpa por ello. El narcisismo en los líderes de sectas se manifiesta en su necesidad de ser vistos como salvadores. Además, buscan constantemente la admiración y el rec
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¡Recibiendo Otro Espíritu!

 Tan pronto como su mano derecha la puso sobre mi sien izquierda y su mano izquierda sobre mi sien derecha, sentí que mi cuerpo pesaba menos, cada vez menos, y cada vez menos... al mismo tiempo sentí que algo caliente caía sobre mi coronilla y descendía por mi cabeza, cuello y el resto de mi cuerpo. Y cuando creo que llegó a mis pies yo estaba flotando.        Solamente escuché decir al evangelista: —"¡Recibe! ¡Llénalo con tu espíritu!", y al instante tuve un tiempo como en blanco.        En realidad no era que todo estaba en blanco, o yo me veía en una luz intensa al fondo de la oscuridad. Yo creo que al fin estaba disfrutando de la unción que tanto estaba buscando. Entonces me quedé ahí perplejo por tremenda experiencia.        Cuando volví en sí. En realidad siempre estuve en sí, pero como distraído, en otra atmósfera. Estaba con el Espíritu. Pero cuando regresé de esa experiencia. Como si volviera a tener conciencia de que estaba en un culto en Remar, y que h

El Canguro Negro

Las tardes de oración las hacíamos en un salón de escuela bíblica. Es cierto que no tenía más que una pequeña ventana, pero todos los guerreros cabían allí para orar. Teníamos la carga por la comunidad. Tanta gente necesitada. Jóvenes perdidos en drogas. Prostitución y delincuencia. Cada tarde, conforme podíamos, nos reuníamos a orar dirigidos por la pastora, la guerrera mayor.        Esa tarde, sucedió algo inusual. Normalmente cada tarde de oración eran oportunidades para la guerra de los dos mundos, de la luz con las tinieblas, del bien contra el mal, de Dios contra satanás. Ese día estábamos listos para iniciar y la pastora arrancó la oración al frente de todos.       —Hermanos, mientras iniciábamos la oración, sentí en mi espíritu que hay una fuerte presencia de las tinieblas aquí, oremos. —La pastora ya tenía una carga nada más iniciando la oración. Ella suele ser muy sensible a las cosas espirituales. Y los tiempos de oración son tiempos donde ella hace fluir su don.

La Armadura del Terror

    ¡Señor, ya no más! Decía Ella, mientras se retorcía en el suelo al mismo tiempo que carcajadas salían de su boca. Su cuerpo parecía estar amarrado al piso ya que por más que ella intentaba levantarse, un enorme peso la jalaba hacia el suelo. El salón de la iglesia estaba lleno de una atmosfera muy especial que parecía que tocabas las alas de ángeles que adoran a Dios en el cielo, y cada vez que cantábamos esa alabanza de Danilo Montero “…tocar tu manto Señor”, ella nuevamente decía:       —¡Señor, ya no más! ¡Me pesa demasiado! ¡Ya no quiero tu armadura!        Gritaba, mientras las carcajadas se iban y venía angustia sobre ella, su voz se tornaba quebradiza, y lágrimas corrían por sus mejillas. Ahí estaba la iglesia entera mirando cómo una risa llamada santa se había apoderado de ella, pero ahora ella llora de angustia. Ella ya no soporta el peso de la armadura de Dios.     El tiempo de la ministración se había tornado muy espiritual, nosotros íbamos canción tras canción,